n el pasado, a los niños que cogían mal un instrumento de escritura les ayudaba este ejercicio cuando se llevaba a cabo durante un largo periodo de tiempo. Es importante que cuando un niño vuelva a aprender a sujetar un instrumento de escritura, nunca (!) tenga que concentrarse en contenidos específicos al mismo tiempo. Cambiar un movimiento requiere toda la concentración; del niño, por lo que este ejercicio también debería realizarse durante el tiempo libre o en fases de diferenciación.
para cada niño.
Este ejercicio ayuda a los niños a aprender a utilizar el dedo corazón como dedo de apoyo bajo el instrumento de escritura. Si el dedo corazón se quedara en la parte superior del bolígrafo o lápiz, quedaría un hueco en el lateral, ya que los dedos anular y meñique están sujetando la cuenta. En ese caso, el bolígrafo no se puede sujetar de forma estable y resulta prácticamente imposible escribir sin perder el instrumento de escritura.
Gracias al ejercicio con la perla, el niño encuentra con éxito un agarre con tres dedos que le permitirá sostener el bolígrafo de forma relajada y escribir sin tensión.