Aprender a escribir sistemáticamente

Ponerse en movimiento

Una vez desarrolladas las habilidades motrices gruesas, de tu hijo, éste perfeccionará sus habilidades motrices durante sus primeros años de vida. Una motricidad fina bien desarrollada sienta las bases para que tu hijo’aprenda a escribir y facilita este proceso de aprendizaje – Por ejemplo, tu hijo practicará esta motricidad fina de forma divertida cuando juegue con cuentas e hilo, amase plastilina, se ate un lazo y haga manualidades.

Si animas a tu hijo a hacer ejercicios preparatorios, le darás la posibilidad de practicar la secuencia de movimientos de la mano durante la escritura. En este contexto, debes pedirle que haga movimientos amplios con todo el brazo. Si dispone de suficiente espacio y de una hoja de papel grande, podrá sentir las secuencias de movimientos sin tensar los músculos.
stos movimientos se irán perfeccionando al implicar a toda la mano y – más adelante – movimientos intencionados de los dedos. Los denominados ejercicios para practicar movimientos suaves y uniformes del lápiz ayudarán a tu hijo a aprender la secuencia de movimientos de la mano/muñeca durante la escritura. Además, debe familiarizarse con el ritmo, de escritura, ya que al escribir, cambiamos permanentemente entre trazos rápidos y pausas breves. No dude en estimular el entusiasmo y la curiosidad de su hijo’por descubrir el mundo de las letras,, ya que aprender a escribir mejorará el desarrollo general de su retoño.